Hace tiempo que existe mucho ruido sobre técnicas y estrategias de stroytelling y, además, ahora te cuentan que con la inteligencia artificial puedes crear todo tipo de contenidos e historias a cascoporro. Nada más lejos de lo que tu audiencia necesita para fijarse en tu causa.
En el sector social, el ruido está de más. Qué quiero decir con esta afirmación, que en el sector social hemos de ir al grano. Contar lo importante de la labor de tu entidad, a través del storytelling. Pero este storytelling, es decir contar historias para obtener unos resultados (ya sea más socios, voluntarios o donaciones), no se trata de hablar sobre tu causa. Se trata siempre de tu audiencia. Primero, necesitas visualizar un objetivo claro que quieres lograr con esa historia y escoger después el tipo de experiencia/historia que mejor te ayude a lograrlo. No vale contar por contar. Hay que crear historias en base a un objetivo claro. El storytelling social no es contar cuentos. Podrás elegir diferentes tipos de experiencias, seguro que en tu proyecto tenéis mil y una historias que podéis contar para lograr la implicación deseada por parte de la audiencia. Y si no las tienes, tocará inventarlas. La clave está en mostrar cómo tu labor, además de beneficiar a la sociedad, puede mejorar también sus vidas. Y ¿por qué es tan importante crear estas historias? Pues para hacer la lectura entretenida, mientras aportas el valor que ofreces a través de tu causa para conseguir que te apoyen en tu objetivo.
El storytelling es increíblemente poderoso. Pero la mayoría de las entidades no lo desarrollan correctamente. Para tener éxito con tus historias y conseguir tus objetivos prueba a escribir historias que contengan:
·Deseo
·Problema
·Solución
·Transformación
Y tu audiencia te prestará atención hasta el final.
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